jueves, 12 de septiembre de 2013

Irresponsabilidad general



Táchenme de lo que quieran, pero lo del accidente de tren gallego, ya empieza a darme mala espina. Resulta que el juez ha solicitado nombres de los responsables de la señalización y seguridad de la vía. Y el Ministerio de Fomento, en esa voluntad que les caracteriza de no asumir nada de responsabilidad, no solo le ha mandado un listado interminable de nombres, sino que ha añadido a los diseñadores del trazado y cargos políticos del gobierno anterior.

No crean que me quejo de eso, ni mucho menos. Si hay que llegar hasta las últimas consecuencias se llega. Pero quiero que eso se lleve a cabo en cada uno de los cientos de accidentes que se producen en las carreteras españolas día a día. Porque si vamos a hablar de cifras, 80 muertos son una dieciseisava de los más de 1300 que caen al año en esas carreteras, del Ministerio de Fomento también.


Si en el accidente de Santiago van a llamar hasta al albañil que ponía las traviesas, quiero que en cada accidente de tráfico llamen hasta al tío de la gorra que pintaba las rayas en la carretera. ¿Porqué el accidente de una carretera se da por sentado que el culpable de la misma siempre es el conductor, y/o el exceso de velocidad?, y el peralte de la vía, ¿estaba correcto?, y el asfalto, ¿estaba perfecto?, y la visibilidad de la zona ¿se había previsto cuando se diseño la carretera?, y… añadan lo que gusten, seguro que si revisamos a fondo cada uno de los accidentes encontraremos una causa ajena al conductor que le exonere de culpa.

¿Cuántos accidentes se han producido en la famosa curva de la Torrecilla durante tantos años?, a qué ingeniero o responsable de obras públicas han imputado por ellas?.
Lo que quiero decir es que, sin quitar razones, cada cual asume una responsabilidad en su tarea diaria, un mecánico que no apriete bien una tuerca en un taller puede causar la muerte de una familia, por lo que asume una responsabilidad en su trabajo. Si pretendemos que todo lo hagan las máquinas perderemos nuestra capacidad de decisión. Asumir nuestra responsabilidad en cada ocasión no significa más que un gesto de honradez y de saber que el trabajo esta bien hecho. 
Si la vía estaba en malas condiciones, ¿Por qué no se denunció por quien correspondía en su momento?, ¿porqué el mismo maquinista había pasado cincuenta veces sin problemas por allí?, el corporativismo, la defensa de la irresponsabilidad, solo contribuirá a que nos coloquen un dispositivo automático y echen a los maquinistas de Renfe, un colectivo muy bien pagado por la responsabilidad que asume, por cierto.

Si se investiga, que se investigue todo, en la carretera hay miles de curvas mal hechas, miles de kilómetros mal asfaltados, miles de despistes que no terminan en accidente porque debe haber ángel de la guarda, pero por favor, no seamos tan irresponsables que jamás asumamos nada. 
La culpa es del maestro, que me tiene manía. ¿verdad?